La importancia del trabajo multidisciplinar en la logopedia
Como ya sabemos, en todos los ámbitos de la sociedad, cada profesional es reconocido por llevar a cabo una tarea determinada, sin embargo, todavía hay cierta reticencia al hecho de poder compartir nuestro trabajo con otros profesionales los que, muchas veces, son imprescindibles para determinar posibles alteraciones que nos ayudarán a realizar un diagnóstico preciso del caso y poder obtener así una evolución más favorable del paciente.
Como logopedas debemos potenciar esta necesidad de compartir y trabajar de forma conjunta con otros profesionales, es decir, desde el ámbito logopédico entendemos que es muy necesario llegar a conseguir un trabajo multidisciplinario, un trabajo que nos permita compartir conocimientos e inquietudes con profesionales de la salud como pueden ser: Maestros, otorrinolaringólogo, ortodoncista, Pediatras, Oftalmólogos etc.
Quizás, en alguna ocasión nos podemos llegar a preguntar qué relación existe entre estos profesionales y nosotros, los logopedas. Pues bien, tanto ellos como su disciplina, nos pueden ayudar muchas veces a determinar diagnósticos o encontrar la causa de las dificultades o alteraciones que pueden estar sufriendo nuestros niños.
Aunque la logopedia es la disciplina encargada de trabajar las alteraciones del habla y el lenguaje, también es verdad que, para llevar a cabo un buen trabajo debemos tener en cuenta muchos factores.
Por ejemplo, ante un niño con problemas de articulación, no nos limitaremos a trabajar sin saber si esta alteración es simplemente funcional o, por el contrario, hay una disfunción orgánica, como puede ser un frenillo lingual corto, una maloclusión, problemas auditivos, etc.
Es en este momento cuando, como profesionales debemos tener la capacidad de derivar al niño al especialista que consideramos más oportuno, en este caso el derivaríamos al ortodoncista y, una vez este profesional haya establecido su diagnóstico, trabajaríamos conjuntamente
De la misma manera que un niño con dificultades del habla sería valorado por el ortodoncista y, quizá también por un Otorrinolaringólogo, para descartar posibles problemas auditivos que puedan estar perjudicando la producción del habla, de esta misma manera, un niño con dificultades de aprendizaje o problemas de lectoescritura, sería conveniente que fuera valorado por el Oftalmólogo o el Optometrista, ya que, si hay alteraciones a nivel visual, es muy posible que estas alteraciones estén influyendo de manera negativa en la lectoescritura (si ya ha empezado a leer y escribir) o en la adquisición y desarrollo de aprendizajes.
Así pues, trabajar con un equipo multidisciplinar puede ser muy beneficioso a la hora de resolver una dificultad, una alteración o una disfunción de nuestros pacientes, ya que, cada profesional aportará, con su disciplina, sus conocimientos y, trabajando conjuntamente, la evolución del paciente será mucho más favorable.
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